10 de Abril del 2024
El Síndrome de West, más conocido como Espasmos Infantiles
El Síndrome de West es una condición neurológica que afecta a bebés menores de un año. puede tener diversas causas. Su diagnóstico y tratamiento son importantes para el bienestar del niño.
¿Qué es el Síndrome de West?
El Síndrome de West pertenece al grupo de las «Encefalopatías Epilépticas Catastróficas» y se caracteriza por espasmos infantiles, un tipo especial de ataque epiléptico. Estos espasmos afectan principalmente a niños menores de un año, dividiéndose en dos grupos: sintomáticos y criptogénicos.
Síntomas del Síndrome de West:
Los síntomas incluyen espasmos flexores, extensores y mixtos, así como retraso psicomotor y alteraciones en el electroencefalograma que muestran hipsarritmia.
Causas del Síndrome de West:
Las causas pueden ser sintomáticas (previamente signos de afectación cerebral) o criptogénicas (causa oculta). Factores como lesiones cerebrales, desórdenes metabólicos, anomalías cromosómicas y desórdenes dentro del útero pueden desencadenar el síndrome.
Diagnóstico y Pronóstico:
El diagnóstico precoz es fundamental, con la identificación de una triada característica que incluye los espasmos masivos infantiles, el retraso en el desarrollo psicomotor y las alteraciones en el electroencefalograma. El pronóstico varía dependiendo de la causa subyacente, con posibilidades de curación completa en casos idiopáticos pero severas secuelas en otros.
Tratamiento:
El tratamiento puede incluir fármacos y en situaciones específicas, la cirugía puede ser una opción.
En conclusión, el Síndrome de West es una condición grave que requiere atención médica especializada. Con un diagnóstico temprano y un enfoque de tratamiento adecuado, se pueden mejorar las perspectivas para los pacientes afectados.
Si sospechas que tu hijo podría estar experimentando estos síntomas, no dudes en buscar orientación médica lo antes posible.